Me dices que amo en exceso, sin decoro pero,
no sé hacerlo con mesura o con pudor.
Te molesta, mi amor, el modo en la que deseo.
Me reprochas que deseo sin medida, sin vergüenza pero,
no sé hacerlo con cordura o sensatez.
Te molesta, mi amor, la manera en la que beso.
Me reprendes porque beso con demasía, sin timidez pero
no sé hacerlo con moderación o vergüenza.
Si te disgusta la forma en la que amo,
el modo en el que deseo o la manera en la que beso,
¿no te has parado a pensar que tal vez el equivocado eres tú?.
Que un amor con mesura no es amor, es cariño,
que un deseo con pudor no es deseo, es disciplencia,
que un beso con moderación no es beso, es continencia.
No esperes eso de mí. Soy mujer vehemente y excesiva,
pasional e irreflexiva. Si buscas calma, cautela, frialdad,
lo siento, mi amor, tu no puedes ser el objeto de mi entrega.
Foto de Eugene Delacroix.
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