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"Me doy a mi misma buenos consejos pero rara vez los sigo"...
Lewis Carrol "Alice in Wonderland"

viernes, 18 de diciembre de 2015

"NUESTROS BESOS " (M.A.M.)

Muchas veces me has preguntado
por qué me gustan tanto tus besos. 
Me cuesta comprender que aún no lo sepas,
¿acaso no te enloquecen mis besos?.

El beso es un encuentro
por lo general, esperado,
que, a pesar del tiempo transcurrido desde el primer beso,
siempre provoca el deseo de seguir besando.

El beso es preámbulo y epílogo,
es inicio y es final,
introducción y desenlace,
prólogo y conclusión.

El beso en la mejilla es inocente,
en la frente será un beso casto, 
un beso en la nuca es lujuria y, en la boca,
en la boca los besos son pura sensualidad.

Pero se pueden besar mil sitios,
todos aquellos que la pareja desee,
en un juego maravilloso
de lascivia y voluptuosidad.

También se puede besar en cientos de lugares,
dependiendo del pudor de la pareja que besa.
Hay besos de paseo, besos de café y conversación,
besos matutinos que saben a sueño, besos de buenas noches con sabor a calor.

Los besos no cuestan dinero pero
tienen un valor incalculable.
Si tras el primer beso en el cuello llega una sucesión de besos,
éstos seguro acompañarán a nuestro baile cuerpo a cuerpo.

Espero haberte aclarado 
el motivo por el que ambiciono tus besos.
Ahora soy yo quien pregunta:
"¿por qué te gustan tanto mis besos?".







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