Lo siento, hoy no tengo ganas de escribir.
Tras la barbarie ocurrida ayer en París, cualquier cosa que escribo me parece una frivolidad. He iniciado tres o cuatro poemas que no he sabido continuar...
Estoy consternada y asustada.
El hombre, desde que es hombre, ha crecido, evolucionado, expandido gracias al uso de la fuerza de las armas. La historia de la Humanidad está escrita con sangre desde sus más remotos orígenes, tal y como si la violencia estuviese incrustada en nuestro ADN y dudo mucho que, a estas alturas, logremos alcanzar la paz.
Realmente, ¿existe la paz?.
Si revisamos la historia de cualquier imperio, país o pueblo remoto, su línea argumental siempre es una evolución de conflictos armados con pequeños períodos "no violentos" intercalados.
A estas alturas, creer que se va a alcanzar una solución pacífica me parece una inalcanzable utopía pues, como siempre, para acabar con los violentos se utilizará la fuerza y eso generará más odio en un bucle sin posibilidad de salida.
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