me he despertado
y
sin necesidad
de abrir los ojos
he sabido que estabas
ahí, a mi lado,
justo detrás de mí.
He sentido
tu cadenciosa respiración
en mi nuca
y tu brazo izquierdo
reposa lánguido
sobre mi cintura.
Tus rodillas
han formado un perfecto
puzzle
con la curva de mis piernas.
Somos uno, sin dejar de ser dos.
Y,
¿sabes qué es lo que más me gusta?.
Que, cuando despiertes,
besarás con dulzura mi cuello,
acariciarás con cuidado mi cintura
y
agarrarás tus rodillas,
abrazando mis piernas
mientras susurras bajito,
"Buenos días, mi niña,
¿qué tal has dormido esta noche?".
Y yo, tras sentir
que habito
el cielo infinito,
donde se supone que reina
la paz más absoluta,
la felicidad más plena,
responderé,
"Contigo, mi amor,
es imposible no conciliar el sueño,
porque
como dice esa canción de "Los secretos"
que ambos adoramos,
"Ayúdame y te habré ayudado,
que hoy he soñado en otra vida,
en otro mundo, pero a tu lado",
Photo by Ed Van Der Elsken, 1953
Magistral..... Mágico..... Onírico.... Real....
ResponderEliminarEste poema es tuyo...
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