Odio
este silencio
impuesto,
esta ignorancia
que me invade,
este desconocimiento
obligado,
esta imaginación
que no cesa
porque
aunque lo intento,
juro que lo intento,
no sé cómo ayudar
a mi hija
a salir de ese infierno
en el que,
a veces,
se introduce
por caminos nunca recorridos
y
grita,
llora,
se golpea
con saña
y
me mira fijamente
con sus enormes ojos negros
implorando
mi ayuda,
sin hablar
porque
de su boca no salen palabras,
tan solo
ruidos.
Entramos las dos
en un círculo negro
que nos devora.
Son ya muchos años
y
tengo miedo de enloquecer
porque
he convertido en cotidiano
convivir con una pesadilla
llamada
autismo.
Aunque,
siempre hay
treguas
como
cuando
mi hija me besa,
me mira fijamente
y,
después,
se ríe en forma
de musicales
carcajadas.
cuyo motivo
rara vez entiendo.
"Círculo negro " de Kazimir Malévich
Photo "Tulip". 1984, by Robert Mapplethope
Photo by Lissy Larichcia
"Me doy a mi misma buenos consejos pero rara vez los sigo"...
Lewis Carrol "Alice in Wonderland"
domingo, 26 de febrero de 2017
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
"YA NO" (M. A. M.)
Y ahí estás, frente a mí, expectante. Y aquí estoy, frente a ti, atiborrada de experiencias que me impiden avanzar. Debería dejarme llevar, ...
-
(No es un poema, es solo una reflexión que necesitaba vomitar) Ojalá pudiera canalizar mi angustia, dar salida a mi furia. Quisiera transf...
-
Esta mañana me he desnudado de ti. Así, sin esfuerzo. Lentamente fui despojándome de tu voz, deshaciéndome de tu olor, desp...
-
Tengo sueño, siempre tengo sueño, sueño de vivir, sueño de amar. Mis ojos, al dormir, se cierran porque no quieren pensar y es que el sueño...
No hay comentarios:
Publicar un comentario