he sabido que ya no te quiero.
Estás ahí, a mi lado, como siempre,
y no siento nada, ni tan siquiera tristeza.
Hace tiempo que tus besos saben
demasiado a conocido,
que tus caricias recorren caminos
transitados por rutina y con horario.
Tus palabras resuenan en mis oídos
como ecos de promesas incumplidas
y tu risa lleva la cadencia de una triste melodía
que, una vez, tuvo armonía, pero ahora me molesta.
Ya he hecho mi maleta, sin nostalgia, sin pena.
En ella he metido, aquel primer encuentro, el único sincero,
algún beso del principio, alguna de tus sonrisas,
y sobre la cama he dejado todas tus mentiras, tus reproches y promesas incumplidas.
Tal vez no me quisiste como yo hubiera querido ser querida.
Acaso no supe darte lo que esperabas de mí y yo ignoraba.
Solo sé que no te quiero, no te amo, ni deseo
y que mi corazón no alberga tristeza alguna por alejarme de ti.
Fotografía Eva Minaeva
No hay comentarios:
Publicar un comentario